Los dolores musculares se deben a microlesiones o microdesgarros de las fibras musculares y para repararlos el organismo desencadena una pequeña reacción inflamatoria. El músculo se vuelve sensible al tacto y de ahí que aparezca el dolor.
A todos nos ha sucedido alguna vez sufrir agujetas y dolor de piernas después de practicar deporte durante mucho rato o sentir molestias en la espalda y el cuello por estar demasiado tiempo sentado en una mala postura delante del ordenador.